Abandonar a la pareja y a los hijos y adoptar una nueva identidad a 2000 kilómetros de distancia es la manera más sencilla de hacer una mudanza, según los expertos

¿Tienes que hacer una mudanza? Déjalo todo atrás y cambia de vida. Esta es la conclusión a la que han llegado docenas de expertos en logística, que coinciden en que empezar una nueva vida de cero es, a la larga, «más fácil, práctico y barato» que organizar una mudanza. «Cambiar de pareja es duro, pero hay que asumir que la mayoría de mudanzas generan tanta tensión en las relaciones que estas acaban rompiendo igualmente», explica Jaime Moreno, que lleva 30 años al frente de Mudanzas Moreno.

«Mover dos toneladas de ajuar que luego no encajará en la nueva residencia y que finalmente habrá que tirar a la basura para adquirir nuevo mobiliario, con sus correspondientes y difíciles viajes a Ikea, es muchísimo más caro que salir a la calle y, simplemente, dejarlo todo atrás», explica Moreno, que recuerda que lo mejor es dejar atrás todas las posesiones personales «y caminar, caminar lejos, lejos, lejos, todo lo lejos que se pueda, donde nadie sepa nuestro nombre».

Así, el abandono de hogar se confirma como la forma más eficiente de gestionar un cambio de hogar.

Javier Segura, un español que hace tres años tuvo que enfrentarse a un cambio de piso se enfrentó al mismo saliendo de casa con lo puesto y no volviendo la visa atrás, y se muestra tajante: «No sé de quién me habláis, no he oído hablar jamás de Javier Segura, yo me llamo Juan González», ha declarado.

Visto en: Mundo Today

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